La humanidad ya lleva exploradas casi todas las zonas terrestres de este mundo, menos las profundidades marinas. Ya no nos parece tan interesante un descubrimiento arqueológico, una ciudad perdida, un pasadizo secreto descubierto en las pirámides de Egipto o un objeto de miles de años de antigüedad, ¿o sí?


Peces abisales


Indice de contenidos

▲ I. Tiburón vivora (Trigonognathus kabeyai)
▲ II. Tortuga Chitra indica
▲ III. Pyrosomas
▲ IV. Chauliodus (pez abisal)




Sin terminar de explorar nuestro mundo queremos ir a marte

 

  
  Hoy en día los temas relevantes se salen de la tierra al espacio, últimamente se están haciendo muy virales las fotografías y los vídeos tomados por las sondas en Marte, unos dicen que se ven caras, dicen que se ven cuevas que pueden contener extrañas criaturas, o extrañas rocas que aparecen puestas en un sitio de la nada, la verdad es que tenemos que esperar un poco para obtener estas respuestas porque por ahora no se sabe nada concreto.

Pero, nadie parece ver que nos estamos olvidando de una zona que cubre la mayor parte de nuestro mundo y que aún se encuentra inexplorada en su totalidad, esa zona es el mar, nuestros mares, inhóspitos e inmensos con quién sabe que y cuantas criaturas aterradoras e increíbles contenidas allí.



Desde tiburones que parecen anguilas hasta tortugas horripilantes de caparazón blando...



 Debido a la presión a altas profundidades, se nos ha hecho increíblemente difícil acceder a los lugares de las profundidades marinas aún no vistas por ojos humanos. Aunque hemos tenido grandes avances con el submarino, no hemos llegado a desarrollar aún algún vehículo que sea capaz de transportarnos a la profundidad total del mar.

  

Barcos en el fondo del mar



 Lophiiformes: enorme boca, piel desnuda, aletas carentes de espinas, y aletas horrendas. Hemos logrado llegar profundo 11 kilómetros de profundidad para ser exactos, a partir de allí, la presión hace que todo sea una pesadilla, y lo que se ha llegado a ver allí no es nada agradable.



Lophiiformes


  


Agujeros marinos, algo que puede causarle a cualquiera mucha angustia y terror. ¿qué contendrá? ¿qué se esconde allí en esos agujeros enormes? En la lista que te muestro a continuación verás 4 animales del mar que pueden causarle repulsión a cualquiera, o por lo menos una fuerte impresión, comencemos.



Abismo marino



I. Tiburón vivora (Trigonognathus kabeyai)





  Ataca rápidamente y posee muchos dientes afilados por conveniencia. Descubierto en Japón en 1986 este animal es considerado un fósil viviente, puede llegar a medir hasta 4 metros de largo.

  Actualmente, se encuentra en peligro de extinción y no se puede hacer mucho, ya que no se tienen los suficientes datos de esta especie como para actuar ante el hecho, es muchas veces comparado con monstruos de ciencia ficción por su apariencia tan espeluznante.



Tiburón vivora



II. Tortuga Chitra indica

 

   Seguramente muy pocos habrán visto esta tortuga tan espantosa y con caparazón de piel. Habita principalmente en Pakistán y la India, esta tortuga es una muy peculiar. 



  No posee el caparazón duro y resistente que todos estamos acostumbrados a ver, sino uno de piel blanda y babosa que añadido a su extraña forma y anatomía puede causar repulsión a cualquiera.





III. Pyrosomas



  
Ok, calmémonos un poco que todo no son criaturas horripilantes, allá abajo también pueden estar estas criaturas hermosas llamadas pyrosomas. El pyrosomas es prácticamente una colonia de organismos conformada por muchos individuos llamados zooides. Tienen la apariencia de un molusco o un gusano y pueden medir desde unos pocos centímetros a 8 metros de largo, ¿impresionante no?



Pyrosomas





IV. Chauliodus (pez abisal)

 

    

   Equipado con luces en el vientre para cazar a sus presas y también en sus aletas para atraerlas y darles la infortunada sorpresa. Listo pongámonos serios, para terminar dejé él más espeluznante de todos y que es ya un poco conocido.



Chauliodus


 Pertenece a la familia de peces abisales los cuales se encuentran a grandes profundidades del mar, estoy casi seguro de que nadie querría encontrarse con uno de estos allí abajo, los peces de este tipo utilizan órganos bioluminiscentes (que producen su propia luz) para cazar a sus presas cuando la luz solar no llega a esas profundidades en las que habitan. 



Chauliodus



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